La especie estuvo a punto de desaparecer a mediados del siglo pasado y ahora gracias a los zoos tiene una pervivencia asegurada

 

Uno de los objetivos del Oceanogràfic se acaba de cumplir con la cría de un ganso hawaiano (Branta sandvicensis), una especie que actualmente está calificada como vulnerable. Porque esta especie, endémica de las islas hawaianas, también conocida como Nené o Barnacla Hawaiano, no hace mucho tiempo, en 1950, estuvo a punto de desaparecer, al pasar de 25.000 ejemplares a 40 o 50, debido a la introducción de cerdos, ratas y gatos.

Ahora existen más individuos en instalaciones controladas que en el mundo salvaje y sigue reproduciéndose progresivamente gracias a la labor de los zoológicos a los que se ha adaptado perfectamente. De modo que cada individuo que nace tiene un gran valor.

Un ejemplo de esta evolución positiva ha sido el del Oceanogràfic al que en 2019 llegaron tres gansos, dos hembras y un macho para habitar las Islas Oceánicas.

De su buena adaptación habla el hecho de que el pasado 9 de enero nació el primer ganso de Hawai bajo la atenta custodia de sus padres y el lógico alborozo de sus cuidadores, que no han dejado de atenderle, ofreciéndole todo tipo de vegetales y pienso triturado. Igualmente los padres le han enseñado a adentrase en zonas de agua y pese a su diminuto tamaño no tiene ningún temor a mezclarse entre las tortugas gigantes Aldabra (Aldabrachelys gigantea).