• El organismo nacido para aportar conocimiento del mundo marino realiza casi 50 estudios y trabajos de investigación
  • La actividad de la Fundación va desde los análisis a Kylu, a rescatar y criar huevos de tiburones, pasando por la recuperación de tortugas o la evaluación de las causas de la muerte de animales varados

Casi como una coincidencia intencionada, la Fundación Oceanogràfic del mayor acuario de Europa, cumple un año, lo mismo que una de sus principales estrellas, Kylu, el bebé beluga nacido en el centro de la unión de sus padres, Kairo y Yulka. El nacimiento de Kylu, un ser extrordinario que crece fuerte y alegre, fue casi un milagro y ahora esa criatura se ha convertido en un regalo único para la ciencia y, en concreto, para la Fundación que ha podido desplegar, en unas circunstancia absolutamente privilegiadas y de proximidad, una serie de investigaciones que están revelando datos sobre la fisiología de las belugas, que servirán para reconocer a estos grandes mamíferos y ayudar a la conservación de su especie.

Pero el trabajo que se está desarrollando en torno a Kylu, su cuidado, su cría, su conocimiento, sólo es el mas ejemplarizante de las labores realizadas por el equipo de investigadores, biólogos, cuidadores, veterinarios, etc., porque a lo largo de este año se ha registrado un gran número de actividades junto al desarrollo de casi 50 estudios y trabajos de investigación y  conservación, que responden a los principios fundacionales que resume la presidenta de la entidad, Celia Calabuig: “La Fundación Oceanogràfic nació con el objetivo de ampliar la misión del acuario, complementándola con el desarrollo de actividades de responsabilidad social y ambiental, lo que se materializará en labores de educación, divulgación, investigación y conservación manteniendo por encima de todo los estándares de máximo bienestar de los seres vivos a su cuidado”.

Investigaciones de primera mano

Los trabajos que han venido desarrollando desde la Fundación Oceanogràfic se centran en dos grandes áreas: la investigación y la conservación.

En la primera de ellas se abordan estudios de energía y fisiología cardiorespiratoria de los vertebrados marinos que habitan el Oceanogràfic, gestionado por Avanqua, del grupo Global Omnium, con el fin de identificar los límites de supervivencia de estos animales con respecto al incremento progresivo de la escasez de sus recursos alimentarios naturales en los océanos.

Así se están estudiando los mecanismos y la función pulmonar y el coste energético que supone tener que realizar inmersiones más prolongadas en busca de alimento. Los animales son las focas, delfines, leones marinos y belugas.

En el caso de las focas se ha realizado un estudio con el fin de determinar la sensibilidad de la técnica de espirometría para la detección de la neumonía en los animales. Con los delfines se intenta definir cómo ha de ser la espirometría para diagnosticar sus enfermedades respiratorias. Con los leones marinos se han llevado a cabo una investigación para determinar la respiración en los leones marinos de California y otra en Nausicaa, en ese caso sobre la función pulmonar y la tasa metabólica.

En cuanto a las belugas, aprovechando las condiciones excepcionales que ofrece Kylu, siempre colaborativo y divertido, se han registrado datos sobre su sistema respiratorio, vascular, inmunodeficiente y su desarrollo vocal y audición. Por primera vez, se está elaborando un estudio a partir de ecocardiografías para fijar los parámetros cardíacos y el desarrollo del corazón de esta especie, cuyos resultados permitirán entender las limitaciones de la vida en ambientes fríos y cómo los cambios en el entorno podrían afectar a su capacidad de supervivencia.

Se han realizado trabajos sobre la imagen médico y la acústica de mamíferos marinos, en concreto sobre el efecto de las resonancia magnética en vertebrados sensibles a campos magnéticos, como palomas mensajera, y numerosos trabajos de campo sobre el estado sanitario y rehabilitación de tortugas con la evaluación del impacto del síndrome descompresivo y la mortalidad en tortugas marinas tras la interacción pesquerías en la Comunitat Valenciana, en Brasil e Italia. En ese misma área se ocupan del seguimiento por satélite de los quelonios recuperados, la evaluación de las lesiones sublaterales y de la mejora de las técnicas de diagnóstico para la evaluación de enfermedades pulmonares en cetáceos en medio controlado y salvaje.

Los investigadores de la Fundación Oceanogràfic están trabajando para crear modelos que permitan conocer el riesgo del síndrome de descompresión en delfines y tortugas, a la vez que han concluido la fotogrametría del progreso del embarazo de Yulka.

Primera espirometría de Kylu

Sanidad marina, bienestar animal y monitorización

La investigación en sanidad marina, bienestar animal y monitorización in situ ocupa un amplísimo espacio en las tareas de la Fundación Oceanogràfic con trabajos de medicina forense en fauna marina para evaluar las causas de la muerte de animales varados y llevar a cabo estudios epidemiológicos y detectar virus, así como el diseño de técnicas de diagnóstico para detectar nuevos virus y su cuantificación y estudios inmunológicos in vitro.

Con la investigación en bienestar animal, las líneas abiertas tratan de definir indicadores de comportamiento que sirvan para valorar el bienestar del delfín mular o de las tortugas marinas, como, por ejemplo la función inmunológica.

Destaca entre los numerosos proyectos el de recuperación de huevos de tiburones y rayas capturados accidentalmente por embarcaciones pesqueras y su uso en investigación y conservación de las especies amenazadas.

Finalmente se ha seguido con el proyecto en su fase inicial del uso potencial de leones marinos entrenados para el rescate, seguridad y asistencia con fines sociales, con entrenamiento de ejemplares de leones seleccionados para el trasporte y familiarizar a los cachorros con personas en el agua y diferentes objetos.

Conservación de tortugas y Xabia 2017

La principal actividad de conservación del Oceanogràfic se centra en el Área de Recuperación y Conservación Animal (ARCA) del Mar, en la que durante el año y gracias a las campañas de concienciación con el colectivo de pescadores y a la acción de la Red de Varamientos (Conselleria de Medio Ambiente, Universitat de València y Oceanogràfic) se han atendido hasta mediados de diciembre 61 tortugas varadas o procedentes de pesca accidental y se han cuatro cetáceos vivos y una musola.

Se han hecho, no obstante, trabajos de refuerzo y propagación de especies en peligro de extinción con fines a la reintroducción como el programa “head starting”, la cría en cautividad de anguilas, tortugas de tierra, de agua dulce y del Gallipato.

Un programa estelar es sin duda el proyecto de investigación y divulgación Xabia 2017 partiendo de un primer estadio técnico-científico, entendiendo como tal el estudio de la distribución y estructura de las comunidades presentes en los fondos marinos de la costa local para después continuar con un segundo estadio de interpretación de los datos obtenidos con el objetivo de, a través de diversas acciones y/o estrategias de interpretación y concienciación, hacer llegar a la sociedad la riqueza de este patrimonio natural sumergido, haciéndola partícipe en la protección conservación de este legado.

Limpieza de playas y estudio de daños en redes

La Fundación Oceanogràfic también lleva adelante su acción ecologista y de concienciación con el programa de limpieza de playas y fondos marinos en Puçol y Xabia. Además trabaja en la restauración de tres puntos de agua en la localidad de Sueras para facilitar la recolonización de anfibios naturales de la zona y la reintroducción del gallipato.

Es reseñable la experiencia piloto de colaboración con los pescadores de Gandia para hacer frente al problema de la aparición de numerosos desperfectos en sus redes atribuidos a la acción de los delfines, ante lo cual, además de crear un plan de trabajo y organizar una jornada informativa, se ha instalado un equipo de grabación de campo en las redes de uno de los pesqueros.

Divulgación por todos los medios

Junto a la suelta de tortugas como acto divulgativo, además de la participación semanal en programas especializados en diversas radios y la comunicación constante de las novedades del Oceanogràfic, se han llevado a cabo numerosas acciones de divulgación como los cursos a la Cruz Roja para atender el varamiento de animales, se ha participado en experiencias de concienciación como Submon y ofrecido conferencias de distinta índole. También se ha organizado el Festival Internacional de Imagen Submarina y participado en el Bonica Fest o en Ars Frumentaria, el primer foro sobre el Arte de la Alimentación, en colaboración con la Universitat de València o montado talleres divulgativos en la Marina de València.